Sólo permanece viejo lo que se mira con ojos de ayer.

jueves, 6 de enero de 2011

días distintos

(ese maldito terror a bailar con la soledad una vez más es el aceite que lubrica el motor de mi escritura)

Mis días distintos son los que no te pienso (y son pocos).

Desde el día que me hiciste lo que me hiciste
mi corazón vive una tempestad atemporal
¡si al menos hubieras anunciado mi muerte,
hoy no sería un muerto en vida!

Ahora quiero mi venganza y matarte olvidándote
¿Cómo hacer para que muera alguien pero sin poder olvidarlo?
¿Ya te dije yo que sólo muere lo que olvidamos?
Pues entonces nunca podré matarte yo a vos
a pesar de gozar, muy de vez en cuando,
de algunos días distintos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario